El Secretario General de la Administración de Justicia convocó a las organizaciones de Secretarios Judiciales a una reunión el pasado día 3 en la sede del Ministerio de Justicia, en la que se nos informó de las líneas generales del anteproyecto de reforma parcial de la LOPJ, anunciado por el actual Ministro, y que vendrá a sustituir a la anterior propuesta ministerial.
Sobre los ejes de la reforma anunciada referidos a nuestro colectivo, manifestamos nuestra prudencia y los valoraremos en detalle cuando dispongamos del texto. No obstante, desde el SISEJ consideramos que los contenidos adelantados no constituyen un avance significativo para nuestro colectivo respecto a la LOPJ vigente.
Como líneas principales, el Ministerio rectifica el anteproyecto anterior, y se opta por mantener el régimen orgánico del secretario judicial en el Libro II de la LOPJ como directores de la oficina judicial, lo que consideramos acertado y está en consonancia con nuestras propuestas, aunque insistiendo además la reforma en cambiar la denominación formal del Cuerpo a Letrados.
En cuanto al sistema de categorías profesionales, el Ministerio vuelve a cambiar de postura, y optará por un sistema del que aún no conocemos los detalles pero que ahora mantiene las categorías. Pese a ello, se nos afirma que esta vez se resolverá satisfactoriamente el problema de los compañeros sin categoría, lo que, en caso de producirse, consideramos positivo.
En materia de derechos y deberes, se establecerá un régimen de libranzas y el nuevo texto regulará un trámite de audiencia a las organizaciones de secretarios judiciales, aunque sigue sin abordar la cuestión del ejercicio del derecho a la negociación colectiva de nuestras condiciones.
En materia de régimen disciplinario la reforma de la LOPJ establecerá de modo generalizado la sanción de multa.
En cualquier caso, desde el SISEJ valoramos positivamente la decisión del Ministerio de retirar el anterior anteproyecto de LOPJ que suponía un grave retroceso en las funciones y el papel de los secretarios judiciales en la oficina. Pero desde luego no podemos interpretar la desaparición de este retroceso como un avance en sí mismo.
En definitiva, si bien de las primeras impresiones recibidas creemos que la reforma parcial anunciada no supone el impulso que nuestro colectivo reclama ni la administración de justicia como servicio público necesita, remitimos, desde la prudencia, al texto que el Ministerio de Justicia difunda próximamente, y que estará sujeto a informes y modificaciones antes de la tramitación parlamentaria.
