El Sindicato de Secretarios Judiciales ha iniciado una ronda de reuniones con los representantes de grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados con la finalidad de exponer nuestro punto de vista ante los diversos proyectos de modificación legislativa que el Gobierno ha enviado a las Cortes Generales en estos últimos meses de la legislatura, con especial referencia a la Ley Orgánica del Poder Judicial, Ley de Enjuiciamiento Civil, Ley de Enjuiciamiento Criminal, y otras materias como el Registro Civil o la jurisdicción voluntaria.
En este contexto, una representación del SISEJ ya ha mantenido la semana pasada dos reuniones en Madrid con el Grupo Parlamentario Socialista y con el Grupo Parlamentario de la Izquierda Plural, en las que hemos presentado nuestros últimos informes y expuesto nuestra posición sobre los referidos proyectos, cuya receptividad agradecemos. Próximamente mantendremos reuniones con otros grupos, y también esperamos encontrar por parte de la actual mayoría parlamentaria, del Grupo parlamentario popular, espacios de reflexión y cambio sobre estos textos en este tramo final de la legislatura.
Desde el SISEJ apelamos a la responsabilidad de nuestros gobernantes y a la búsqueda del mayor consenso y transparencia posibles al abordar reformas de tanto calado democrático como la organización de la administración de justicia. En especial consideramos importante aportar seriedad ante la pobre interlocución que ha tenido el actual Gobierno en nuestro colectivo, y en general en materias de justicia, tanto con el Ministro actual como con el gabinete de Ruiz-Gallardón. Un ejemplo reciente lo constituye el caso del Registro Civil, en que se ha llegado a transmitir al Ministro una información inventada, como es que “los secretarios judiciales no queremos el registro civil”.
En diferentes reuniones hemos transmitido nuestra profunda decepción con el proyecto de reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial, un precipitado y heterogéneo conjunto de medidas destinado a prolongar la agonía de un modelo de administración de justicia que todos sabemos agotado, paralizando su modernización estructural.
Desde el punto de vista del Cuerpo de Secretarios Judiciales, el texto sólo aporta pequeños cambios para nuestro estatuto profesional de carácter cosmético (por ejemplo, el referido cambio de nombre a “Letrados” o trámite de audiencia a organizaciones profesionales vacío de contenido), manteniendo y consolidando las disfunciones más graves como el régimen de categorías profesionales, incluida la discriminación de la tercera categoría, y blindando la privación del derecho a la negociación colectiva para materias no estatutarias. Recomendamos en este sentido la lectura de nuestra valoración sobre el proyecto, y animamos a todos los Secretarios Judiciales a extraer sus propias conclusiones a la vista del texto. Creemos que se trata de un atraso histórico para nuestro colectivo y para la administración de justicia cuyas consecuencias, en caso de aprobarse con la redacción propuesta, padeceremos en los próximos años.
Desde el SISEJ somos conscientes de estar recogiendo la indignación de una mayoría creciente del Cuerpo de Secretarios Judiciales en una legislatura en la que sólo han existido palabras y en la que lo único que se ha hecho es cerrar puertas a la dignificación profesional de los Secretarios Judiciales como Cuerpo Superior Jurídico.
